CONSTRUCCIONES
MEGALITICAS MONUMENTALES
Con motivo de las primeras actividades agronaderas llevadas a cabo a lo
largo del Neolítico (6000-3000) años a. C., estas primeras sociedades de
productores de alimentos sentirán la necesidad de hacer notar la propiedad de
la tierra que trabajan y, para hacerlo constar, levantarán hitos monumentales
que expresan ideas simbólicas, e indicativas de propiedad del territorio que
pueden ser de índole social, funerario, político o religioso.
Estos monumentos son construidos con grandes piedras megalíticas; término
que proviene del griego con significado de mega (grande) y lithos, (piedra) que
serán dispuestos sobre el territorio de diversas maneras y con significados
distintos como a continuación veremos.
MENHIR DE LOS FRAILES
· Iniciamos esta andadura con las primeras manifestaciones monumentales
megalíticas que el hombre levantó para dejar constancia de la apropiación del
territorio por un grupo determinado, como fueron los Menhires; palabra procedente del celta, con significado de men
(piedra) e hir (larga); estos hitos monumentales están formados por una gran
piedra hincada en el suelo y colocadas en lugares de paso obligado, visibles y
cercanos a los poblados y tierras de labor, los que en algunas ocasiones pueden
estar decorados con pinturas o grabados, y en otros de ambos a la vez,
reflejando sobre su superficie figuras antropomorfas, cazoletas, líneas
quebradas, serpentiformes, soliformes, armas, etc., cuya funcionalidad
corresponde a comportamientos testimoniales de propiedad del territorio por
parte de grupos organizados; estas
grandes piedras también son conocidas como Monolitos,
nombre que reciben del griego, con significado de mono (una) y lithos (piedra).
MENHIR DECORADO
· Otra construcción megalítica muy interesante es la formada por varias
piedras grandes hincadas en hilera, en la que pueden intervenir varias docenas
de ellas, por lo que esta manifestación megalítica, recibe el nombre de Alineamientos las que a su vez pueden
estar formadas por una, dos, tres o más hileras.
Estos espacios monumentales
que señalan estas alineaciones, parecen tener la funcionalidad de prácticas
ceremoniales conmemorativas, relativas a ciclos naturales, como la celebración
de la colecta de la cosecha de los cereales.
ALINEAMIENTOS
· También hace acto de presencia
otras construcciones megalíticas dispuestas en forma circular, que reciben el
nombre de Henges o Cromleh, siendo
interpretados como lugares dedicados a ceremonias religiosas y a reuniones de
índole social.
CROMLECH
Todas estas manifestaciones contruidas con grandes piedras, de
las que hasta ahora hemos hablado son muy abundantes en Inglaterra, Francia y
la Península Ibérica, en especial en Portugal, Galicia, y S.O. de Andalucía,
llegando algunas de ellas hasta la comarca de Los Pedroches.
· Igualmente existen otros monumentos megalíticos como son las construcciones
funerarias doménicas, que aunque su uso fue iniciado a mediados del Neolítico,
será en el Calcolítico cuando adquieran mayor auge; estas son construidas de
diversas formas en cuanto a tamaño, planta y técnicas constructivas,
distinguiéndose varios tipos; entre ellas se encuentran las construidas con
varias grandes piedras hincadas en el suelo situadas (ortostatos)
anarquicamente, lo que da lugar a que la planta de estas estructuras funerarias
adquieran forma de un Poligono irregular;
otras denominadas como sepulcros de
corredor, o cámara con corredor diferenciado, cuya planta puede responder
a formas rectangulares, cuadrangulares, o trapezoidales, siendo estas las más
abundantes de todos los tipos; y otras como las galerías cubiertas, o cámaras con corredor diferenciado, que por
sus formas pueden ser rectangulares y/o trapezoidales; casi todas estas
construcciones a excepción de las galerias cubiertas disponen de un pasillo o
corredor, que une el exterior de la tumba, con la cámara funeraria, el que en
la mayoría de los casos aparece orientado hacia la salida del sol, aunque puede
tener algunos grados de declinación al Norte o al Sur, según hubiesen sido
construidas en el solsticio de invierno o en el del verano.
Todas estas cámaras y pasillos están cubiertas por una o varias grandes
piedras, usando para ello el sistema constructivo de adintelamiento, las que
posteriormente serán “arropadas” por una gran estructura tumular formada por
medianas y pequeñas piedras muy bien compactadas con tierra, siendo a su vez
rodeada en todo su perímetro por piedras que cumplen la función de sujetar la
gran presión que ejerce el peso sobre la construcción, dando la sensación una
vez concluidas, de encontrarnos ante la presencia de un vulgar montón de
tierra, sin delatar la existencia en su interior de estructuras funerarias; el
que a su vez cumple la función, entre otras, de preservar la edificación de los
agentes atmosféricos temporales, como son la lluvia y el viento.
· Existe otro tipo de construcción funeraria, que alterna las técnicas
constructivas ortostáticas (grandes piedras hincadas en el suelo) con la
mampostería; como suele ser el caso de la construcciones de planta circular o
tendentes al circulo denominadas tholoi;
estas tumbas monumentales son cubiertas por una falsa cúpula construida por
hileras de piedras que, por acercamiento consecutivo de las mismas, adquiere
forma de cúpula que al igual que las anteriores tumbas descritas, estas
también serán “arropadas” por una estructura tumular construida con los mismos
elementos que más arriba hemos indicado.
· No solo fueron usadas estas tumbas como enterramientos colectivos, que se
pueden tachar de clánicas y que tanto trabajo y esfuerzo físico representaba
su construcción; sino que también se enterró en otros lugares donde el trabajo
empleado en la construcción de la misma requería menor esfuerzo en la
extracción y acarreo de los materiales que las componen. Ejemplo de este tipo supuso el
entrerramiento en alguna de las cavidades existentes en las Cuevas naturales.
Aunque en esta
comarca de Los Pedroches, los hombres del calcolítico no tuvieron problemas
para el acarreo de materiales de construcción de las tumbas eligiendo en
muchas ocasiones el lugar de su construcción, al lado, encima, o muy inmediato
a cualquier afloramiento de granito o pórfido abundante en toda la comarca,
pudiéndose apreciar en ellos, las huellas de la extracción de dichos
materiales.
· Del mismo modo, se llevaron a cabo enterramientos en otros lugares que requerían
menos esfuerzo en el acarreo de materiales; como fueron los hoyos practicados
en el suelo ya amortizados cuyo fin en su primer uso fue el de silos para el almacenamiento anual de
los cereales que se consumían a lo largo del año en los poblados; para el mismo
uso también fueron utilizados los basureros
que consistían en hoyos practicados en
el suelo en los que eran depositadas las basuras que el poblado generaba, y una
vez colmatados eran utilizados para dar sepultura a los muertos, los que, por
alguna circunstancia desconocida hasta ahora, eran carentes de ajuar, por lo
que se puede aventurar que existe la posibilidad que estuvieran trabajando en
ese lugar en régimen de esclavitud.
Todas estas tumbas fueron usadas como enterramientos colectivos, en el
sentido de sucesivos; los que pueden alojar desde uno a varias decenas de
cadáveres, llegando en algunos de ellos a albergar más de un centenar y que
una vez depositados en la tumba recibían de familiares y amigos un ajuar
funerario de mayor o menor cuantía, según la relevancia social que el finado
hubiese tenido en su vida.
Éste generalmente estaba compuesto de vasijas,
cerámicas de diversas formas y tamaños relacionadas con el consumo de
alimentos, consistentes en grandes fuentes, platos, cuencos, vasos, etc., a los
que acompañaban contenedores para sólidos fabricados de fibras vegetales como el
esparto y la mimbre.
Junto a estos elementos también ofrendan un nutrido elenco
de útiles de piedra tallada y pulida consistentes en puntas de piedra talladas
primorosamente en distintos pedernales, como el silex, cuarcita, cuarzo,
“cristal” de roca, etc., las que indistintamente podían ser utilizadas para la
caza, como para la guerra; entre estos también les eran depositados elementos
de piedra pulida como hachas y azuelas destinadas al trabajo en el campo y a
faenas de carpintería.
Además podía haber bonitos elementos de adorno consistentes en colgantes
y cuentas de collar, fabricadas con vistosos pedernales procedentes de diversos
lugares de la Península Ibérica, producto de intercambios comerciales llevados
a cabo a pequeña, mediana o larga distancia.
Y ya en momentos tardíos del
calcolítico, algunos de ellos podían cobijar algún elemento metálico como
cuchillos de escotadura, de lengüeta, de remaches los que pueden estar
acompañados por alguna punta de flecha de las llamdas de Palmela.
DIOSA MADRE
- Todos los cadáveres fueron enterrados por el rito de la inhumación y
depositados en la tumba muchos de ellos flexionados significando la postura de
los fetos en el interior del vientre materno, asemajando con ello que el
finado, por el hecho de ser enterrado, volvía al vientre materno, unido al
cordón umbilical representado por el pasillo o corredor que le une a la vida,
significada por el primer rayo de sol que incide a lo largo de él y llegando
hasta la cámara funeraria dándole la luz después de las tinieblas; mostrando
de esta forma el ritual de la vida y la muerte, bajo la creencia del
resurgimiento a la vida después de la muerte.
Rito que representa la fertilidad
de la tierra en el reino animal y vegetal, creencias que estas sociedades
adquirieron con la aparición de la agricultura y la ganadería; hechos que
posibilitaron “dar vida” a una diosa de
la fertilidad, representada por la Gran Madre Tierra, dueña y señora de la vida
y de la muerte, la cual adquiere forma humana en pinturas y grabados, que
reflejan en cuevas y abrigos y en algunos paneles al aire libre, dispuestos en
consonancia con lugares de paso y cañadas ganaderas.
Esta madre tierra se muestra vestida
con una falda que le cubre la cintura hasta los pies dejando el torso desnudo y
los senos al descubierto, y cuyos brazos en algunas de ellas aparecen abiertos
en cruz y las palmas extendidas; pudiéndose apreciar esta deidad en el abrigo
denominado como la Diosa Madre en el paraje denominado de Los Cañones (Jaén) y
también en el liso de pizarra grabada junto a varias figuras más representando
un sacrificio humano en el lugar denominado Tablilla del Mellado (Vva. de
Córdoba)
GRAN DIOSA - Tablilla del Mellado (Vva. de Córdoba)
SILVERIO GUTIÉRREZ ESCOBAR