EL DÍA DE LAS PIEZAS.- FUSAYOLAS (para el huso de
hilar lana)
Se
fabricaban en un metal pesado como es el plomo, muy abundante en nuestra
comarca, de fácil elaboración por su ductilidad; el proceso de fabricación era
sencillo, y se efectuaba licuando el plomo que se vertía sobre moldes de barro,
de los que salía lista para ser colocada en el huso; eran estas unas
“arandelas” que miden más o menos de dos o tres centímetros de diámetro y
alrededor de 1cm. de grueso, siendo su canto exterior unas veces redondeado y
otros biselado y poseían un agujero donde era insertado el huso.
Era
este una pequeña varilla de madera de 25 – 30 cm. y del mismo grueso que tenía
el agujero de la fusayola, siendo colocada ésta en el extremo inferior del
mismo, posibilitando que ese contrapeso haga girar el huso que tenía la función
de fabricar el hilo de los vellones de lana de las ovejas de la Bética tan
alabados por Íberos y Romanos.
Estas
pequeñas piezas aparecen con gran profusión en los Yacimientos de Época Romana
por toda la Comarca Pedrocheña, y tienen clara interpretación pues, en dicha
época, Los Pedroches mantuvieron una cabaña de Ganado Ovino muy importante.
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